28/7/11

¿Cansancio excesivo que no cede ante el descanso?

.
¿Cansancio excesivo que no cede ante el descanso?

Bertha Sola

El Síndrome de fatiga crónica, es una enfermedad crónica y muy compleja, de origen desconocido y cuyo síntoma principal es un gran agotamiento que invalida a la persona para realizar sus actividades diarias.

La fatiga que genera, no desaparece con el descanso y puede empeorar al realizar alguna actividad física o mental.

Esta enfermedad afecta principalmente a adultos jóvenes y con mayor incidencia en las mujeres, y aunque no hay datos firmes sobre ella en los últimos años su diagnóstico es más frecuente.

Entre las posibles causas identificadas están: Una enfermedad infecciosa previa, periodo de estrés muy grande, deficiencias hormonales, alergias o  reactivación de un virus latente.

Algunas enfermedades como: la depresión, el lupus, la leucemia y otros tipos de cáncer, la hepatitis, el SIDA, la anemia y las enfermedades cardiacas, pulmonares, hepáticas y renales.

Efectos secundarios de determinados fármacos.

Daño neurológico por enfermedad previa.

Sin embargo, también se pueden presentar poco a poco sin causa aparente y en cualquier momento y en muchas personas desde la adolescencia.

Pueden llegar a manifestarse nuevos síntomas o signos o desaparecer algunos de los que ya tenían y pueden variar en duración e intensidad. El curso de la enfermedad es impredecible y alterna períodos de remisión con “brotes o crisis” y en varios casos la fatiga llega a ser invalidante.

Entre los síntomas o señales que pueden presentarse están: Fatiga extrema, dolor y debilidad, muscular generalizada en todo el cuerpo, sobre todo en espalda, brazos, piernas y manos, fiebre, alteraciones del sueño, ansiedad, depresión, nerviosismo extremo, pérdida de memoria y concentración, colon Irritable, dolor en las articulaciones, estreñimiento, hormigueo en extremidades, faringitis o garganta irritada, dolor de cabeza y a veces dolor en ganglios del cuello o linfáticos.

Debido a que la fatiga es un síntoma de casi todas las enfermedades, el diagnóstico se establece cuando al hacer la historia clínica, la persona enferma refiere que lleva por lo menos 6 meses consecutivos y que no es consecuencia del ejercicio físico y no se alivia con el reposo y después de haber descartado otras enfermedades preexistentes, como depresión, lupus, leucemia y otros tipos de cáncer, hepatitis, SIDA, anemia y las enfermedades cardiacas, pulmonares, hepáticas y renales, o como efecto secundario de tomar algunos medicamentos.

La revisión médica debe incluir exámenes del estado físico y mental general en el que se registren que hay cinco o más de los síntomas mencionados y solicitar análisis de sangre, orina, radiografía de tórax y otros que considere pertinentes.

Por ser de origen desconocido, el síndrome de fatiga crónica no tiene tratamiento específico ni curación, pero sí se pueden controlar los efectos de la sintomatología si se identifica en cada persona cuáles son los factores que la agravan.

Entre los medicamentos utilizados están los analgésicos como la aspirina y los antiinflamatorios no esteroideos, que ayudan a aliviar la fiebre y los dolores de cabeza, musculares y articulares.

Para la depresión y la ansiedad, se pueden recetar antidepresivos y otros fármacos psicotrópicos.

Se recomiendan también complementos dietéticos que fortalezcan el sistema inmunitario: complemento multi-vitamínico y minerales con alto contenido en vitaminas del complejo B, betacaroteno, vitamina C adicional y cinc.

Una buena alimentación, descanso y hacer ejercicios moderados son recomendables para sentirse mejor.


cronica.com.mx

.

No hay comentarios:

Publicar un comentario