11/11/16

Omega-3 para dolor de cuello y espalda [11-11-16]


Omega-3 para dolor de cuello y espalda

De acuerdo a un reporte del Dr. Joseph Maroon de la Universidad de Pittsburg, el 60% de las personas que tomaron unas cápsulas de 1,200 mgs. De suplemento de aceite de pescado por 75 días, reportaron mejoría en su dolor de cuello y espalda. Se piensa que los ácidos omega-3 que se encuentran en las cápsulas de aceite de pescado tienen un efecto anti-inflamatorio que les ayudó con los dolores en las articulaciones.
Si padece de dolor en el cuello o en la espalda, pregúntele a su médico si puede probarlas, pero no las tome si está tomando Coumadín, Warfarina o cualquier otro anticoagulante porque este suplemento podría aumentar el riesgo de sangrado.

Si está buscando la fuente de la juventud, no se olvide del ejercicio ya que no sólo puede reducir el riesgo de que desarrolle enfermedades crónicas como problemas del corazón y la diabetes, sino que le ayudará a mantener una sensación y aspectos juveniles a medida que envejece.

Muchos de los padecimientos crónicos que experimentamos a medida que envejecemos provienen de la inactividad más que del envejecimiento, así que es importante que sepa que aún los esfuerzos más pequeños para realizar cualquier tipo de actividad física le brindarán beneficios enormes. Si necesita más pruebas, tenga en cuenta que a partir de los 50 años, la gente comienza a perder el 12% de la fuerza muscular y que se pierde el 6% de la masa muscular cada década una vez que se celebran los 50. Sin embargo, dos o tres meses de entrenamiento con pesas tres veces a la semana puede incrementar la fuerza y la masa muscular en un tercio, lo que compensa tres décadas de pérdida de fuerza y masa muscular.

Comience despacio. No exagere. Si se lastima, eso detendrá su progreso. Haga ejercicio idealmente un mínimo de 30 minutos cinco días a la semana. Si no sabe cuanta resistencia tiene, empieze caminando como ejercicio principal. Más tarde, puede seguir con entrenamiento de fuerza, con máquinas de pesas o pesas, y pídale consejo a un profesional. El mito de que el buen estado físico es para los jóvenes debe desaparecer. Uno no deja de moverse cuando se llega a la tercera edad.

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